COLORES DE SORIA

En septiembre pasado nos escapamos a Segovia, Toledo y Ávila, aunque ya conociamos la ruta, siempre hay algo que aprender; de regreso a casa, y en la provincia de Soria pasamos por Valdemaluque (no os perdáis el Cañón del Río Lobos), y por el Burgo de Osma.

Tras un pequeño y muy agradable descanso, pusimos rumbo hacia Zaragoza, el panorama era tan bonito, que no me pude resistir, y desde el coche (no conducía yo por supuesto) fotografíe los campos que ibamos dejando a nuestra espalda, campos de Soria, en la que hay tanto que descubrir.

Es el mismo día, el mismo cielo, pero el paisaje va cambiando poco a poco, son los colores de Soria.

Soria, tierra llena de matices, a través de su paisaje contemplamos un bello juego de colores. Sus grandes campos que te guían hacia un horizonte lejano.

Tierras rojizas, contrastando con cielos azules salpicados de nubes, campos cerealistas, recién cortados, los grises barbechos. Soria, tierra callada y presente. "Soria, ni te la imaginas".

Inmensos campos amarillos con girasoles elevando siempre su mirada hacia el sol.

…"En la deseperanza y en la melancolía

De tu recuerdo, Soria, mi corazón se abreva.

Tierra de alma, toda, hacia la tierra mía,

Por los floridos valles, mi corazón te lleva"…

(Recuerdos. A. Machado).

..."¡Campillo amarillento,

como tosco sayal de campesina,

pradera de velludo polvoriento

donde pace la escuálida merina!"...

(Primavera soriana. A. Machado).

Tierra donde la encina es la reina.

" Una encina en medio del campo es como un imán, un lugar de descanso para la mirada, una sombra en la que refrescar la fatiga del cuerpo" (José María Arcas).