LA LLUVIA TRAJO GRANDES CAMBIOS

... El agua lava la yedra;

rompe el agua verdinegra;

El agua lava la piedra...

Y en mi corazón ardiente,llueve,

llueve dulcemente

(lluvia de otoño. J. R. Jiménez).

La rutina llenaba la vida de todo el pueblo, alguna anécdota de vez en cuando levantaba la telaraña que cubría la existencia de todos sus habitantes. El verano estaba a punto de ceder su puesto al melancólico otoño, y comenzaba nuevamente el ciclo estacional.

La gente temía al inestable otoño, sus tormentas, sus cambios de temperatura, lo habían aprendido desde muy niños; la cosecha de maíz aún estaba por recoger…, siempre mirando al cielo. Empezaba la estación de la gota fría, de las lluvias torrenciales y del temido Cierzo. Era como el ciclo de la vida, nada ni nadie podía evitarlo.

Era miércoles cuando empezó la tormenta, ella pensó que ese miedo había que vencerlo de una vez para siempre. No lo pensó dos veces, descalza y con su vestido rojo salió a la calle. Melena al viento fue recorriendo las calles del pueblo, bailando, cantando, saltando los charcos como hacía de pequeña. Los vecinos se asomaban a las ventanas, pensaban que había perdido el juicio, algunos reían de su locura, pero otros muchos se unieron a su alegre danza bajo la fuerte lluvia. Y así fue como en aquel pueblo, en un triste y gris día, la lluvia trajo grandes cambios.

fotografía: http://es.forwallpaper.com/wallpaper/girl-dancing-in-the-rain-586894.htm