Santuario de Santa María de Salas (Huesca).
“A esta hermita vienen los lugares circunvecinos procesionalmente en sus necesidades a pedir favor y socorro, el qual se les comunica por medio de la Virgen Santissima, como lo declaran la infinidad de presentallas y preseas de oro, plata, mortajas, muletas, grillos, cadenas de cautivos y otras insignias de que la iglesia está casi llena”. (Sic).
(Francisco Diego de Aynsa).
Al sureste de la capital oscense, en el término de Alméritz y junto a la antigua vía romana de Ilerda a Osca y rodeada de huertas, encontramos la ermita de Santa María de Salas, declarada monumento nacional en 1951. Su fundación fue llevada a cabo hacia 1195.
Indudablemente su construcción se debió a algún hecho milagroso, no conocido hasta este momento, ya que desde su inicio la devoción a la Virgen de Salas fue notoria. La Virgen de Salas, según cuenta el padre Alberto Faci, historiador del XVIII , fue traída por ángeles desde la localidad de Salas Altas, cerca de Barbastro; y aunque los vecinos de Salas Altas la reclamaron no la recuperaron nunca. Desde ese momento a la ermita que anteriormente se le llamaba de la Huerta, se la denominó Nuestra Señora de Salas.
Fotografía: http://www.unaventanadesdemadrid.com/huesca-ii.html.
También el padre Faci narraba que fue Doña Sancha, viuda de Alfonso II de Aragón y fundadora del monasterio de Sijena, la que ordenó reedificar la ermita (por lo que se supone que existía un edificio anterior), en una zona cercana a Huesca “entre huertas y bosques frondosos”. Documentalmente no se tiene ninguna noticia al respecto, pero si se conoce que ayudó económicamente a su sustento una vez ya construida.
Fotografía: Jabaeyens
A finales del año 1202 la iglesia en su mayor parte estaba terminada. A través de documentos, que se conservan en el archivo de la catedral de Huesca. se sabe que se la disputaban Berengario, prior de San Pedro el Viejo; y el obispo de Huesca, García de Gudal. Esta disputa se basaba en que la iglesia estaba situada en terrenos propiedad del priorato. Pero el poder es el poder, y desde enero de 1203 la propiedad pasó a manos del obispado.
Pocos años después de erigirse, la iglesia empezó a ser muy conocida, ya que según contaban, la Virgen había realizado numerosos milagros. Tan famosa fue que el rey Alfonso X el Sabio cuando escribió las Cantigas en honor a la Virgen, en diecisiete de ellas narraba los favores realizados por la Virgen de Salas. Hay que tener en cuenta la labor que en aquella época realizaban los juglares, cantando de villa en villa las historias, las cantigas, los poemas, etc. Todo ello hizo posible que los milagros de la Virgen de Salas fueran conocidos por muchos pueblos e incluso llegaran a oídos de los reyes, como fue el caso de Alfonso X (o tal vez al estar casado con Violante, hija de Jaime I, fuera ella misma la que le contara los milagros que sucedían en Huesca).
La fotografía que os pongo es la Cantiga nº 167, en donde se relata la historia de una mujer mora que dio a luz a un hijo muerto e intercedió por él a la Virgen y milagrosamente resucitó. La mujer agradecida fue en peregrinación a Salas (ermita de la Virgen de Salas) y se convirtió. En la viñeta nº 6 pone: “Cómo la buena mujer llevó el hijo a Salas y loaron mucho a Santa María”.
Al final de la biliografía os pongo un vídeo con una cantiga cantada sobre otro milagro de la Virgen de Salas. Así podéis oir cómo eran las cantigas cantadas por los juglares de aquella época. Es una música muy bonita.
Fotografía de la Cantiga de Alfonso X:
http://www.bibliotecagonzalodeberceo.com/berceo/usabiagaurkola/iconografiamilagroencantigas.htm
Todo esto motivó que la iglesia se convirtiera en un lugar de peregrinación famoso. Favorecido por su situación y por la comodidad del camino, ya que el tramo desde el santuario hasta la ciudad estaba totalmente empedrado en aquella época. Tampoco hay que olvidar que muchos peregrinos que iban a Santiago pasaban por esta misma vía. El lugar alcanzó tal importancia que era donde se recibía a los nuevos obispos e incluso a grandes personajes que visitaban la ciudad.
Fotografía: McBodes.
El rey Jaime I fue tan devoto de este santuario que en el año 1250 concedió “privilegio de seguridad y salvaguardia” a todos los peregrinos que visitasen a la milagrosa Virgen de Salas. Privilegio que ratificó posteriormente Jaime II.
En pocos años el santuario recibió numerosas donaciones de la realeza, de la nobleza y hasta del pueblo llano, todo debido al gran fervor religioso que emanaba de la Virgen de Salas. Tanto poder alcanzó, que hasta los Papas Inocencio III, Nicolás III e Inocencio IV (Siglos XII-XIII), concedieron privilegios a todo aquel que peregrinara hasta él.
En el siglo XIV, Pedro IV el Ceremonioso amplió y ornamentó la iglesia. Éste último era tan devoto que estableció en Huesca la primera universidad aragonesa, la universidad Sertoriana, en cuyo escudo se representaba a la Virgen de Salas junto a San Martín de la Val d´Onsera. El acta de fundación de la universidad (Alcañiz, 12 de mayo de 1354) comienza: “Pedro IV de Aragón: Por la devoción que Nos profesamos desde la infancia a Santa María de Salas y a nuestro protector San Martín de la Valdonsera, accedemos a las súplicas de la ciudad de Huesca”.
Mientras tanto los milagros se fueron sucediendo.
Es una iglesia con numerosos añadidos, lo cual hace difícil ver claramente su estructura original. En el hastial de poniente se encuentra la portada principal de la iglesia, bajo un sencillo tejaroz. Se trata de una portada abocinada formada por seis arquivoltas de medio punto en degradación, que apean sobre capiteles sin fustes.
Sobre el tejaroz de la portada un gran rosetón, con molduras decoradas con puntas de diamante. El rosetón fue totalmente restaurado en el siglo XX, anteriormente se encontraba tapiado.
Detalle de las seis arquivoltas que componen la portada, en las que podemos observar la magnífica decoración geométrica a base de dientes de sierra, arquillos de medio punto, molduras en zig-zag, puntas de diamante. El tímpano es liso, quizás estuviera ornamentado con pinturas que se han perdido con el paso del tiempo.
La decoración de las arquivoltas es muy elaborada y rica en detalles.
Detalle de la parte izquierda de la portada. Capiteles, con decoración floral y vegetal. Los fustes han desaparecido por la erosión. Es de resaltar la elaborada decoración del guardapolvo de las arquivoltas, como si de un encaje se tratara.
Parte derecha de la portada donde se puede observar el grado de erosión de los capiteles, también decorados con motivos vegetales.
Hacia 1525 el prelado don Juan de Aragón y de Navarra al estar el edificio en estado ruinoso resolvió reformarlo, mandó construir en el lado norte un pórtico con 10 arcos de medio punto, sustentados sobre columnas poligonales que apoyan en podios corridos, excepto las que dan paso al interior del pórtico. Y sobre él un añadido para ubicar la hospedería, para así atender a los peregrinos que llegaban a la ermita. Era de ladrillo y con decoración mudéjar (franja superior con rombos y esquinillas). El prelado no pudo ver concluidas las obras, ya que murió antes, siguiendo las reformas su sucesor Don Martín de Gurrea (1534-1544).
Fotografía: Realizada por el fotógrafo Ildefonso Sanagustín. Fototeca de la Diputación de Huesca.
En los años 80 la hospedería se eliminó dejando el edificio tal y como lo vemos hoy en día. Actualmente aún está siendo restaurado, tal y como pudimos observar en nuestra visita el día 16 de mayo de 2015.
En el Heraldo del 19 de agosto de 2015 hablan de esta ermita y de su reconstrucción, que asciende a 14.000 euros.
Os pongo el enlace por si a alguno le puede interesar:
http://www.heraldo.es/noticias/aragon/huesca_provincia/2015/08/19/los_trabajos_reconstruccion_ermita_salas_ascienden_000_euros_457185_1101026.html#
A finales del siglo XVI las peregrinaciones fueron decayendo, sobre todo las de fuera de la diócesis de Huesca. Pero la ermita siguió recibiendo la protección papal. En 1669 Clemente IX concedió indulgencia plenaria a todo aquel que peregrinara a la iglesia de Salas en unas fechas concretas.
En la fotografía interior del pórtico, hoy en día, como hemos comentado, en restauración.
En el interior de este pórtico se abre una pequeña puerta, hoy cegada, que pudiera ser por la que se accedía a la antigua hospedería.
La cabecera es plana en la cual se abren cuatro vanos aspillerados, a la derecha, así como huecos que serían ventanales que fueron cerrados en su día. A la izquierda portada sudeste.
En el ángulo sudeste de la cabecera se abre una portada, algo tosca, , con dos arquivoltas que descansan en capiteles y fustes muy deteriorados.
Muro meridional, en el cual podemos observar los contrafuertes.
Otro detalle del muro meridional.
La torre de planta cuadrada tiene tres cuerpos, el inferior presenta una base de sillería (más antiguo que los cuerpos superiores). En cada frente, del cuerpo superior, se abren dos arcos de medio punto, donde se alojan las campanas.
En el siglo XVIII la iglesia aún tenía aspecto medieval; pero en 1722 se le encargó al arquitecto José de Sofí su remodelación. El resultado es un interior totalmente barroco, no parece un templo románico. Presenta planta de cruz latina, con cabecera poligonal, la nave central tiene seis tramos y se cubre con bóveda de cañón. El crucero se cubre con una gran cúpula sobre pechinas; y coro alto, a los pies. Toda la iglesia se decora con yeserías barrocas.
La Desamortización de Mendizabal en 1836 hizo que la ermita perdiera importancia, las peregrinaciones poco a poco fueron desapareciendo. Cómo hemos podido ver en el estudio presente fue una importante iglesia de peregrinación, pero hoy sólo es una ermita a la cual se acude en romería una vez al año, el primer domingo del mes de mayo.
Fotografía: Fernando.
El retablo que actualmente podemos contemplar en el presbiterio sustituyó a uno anterior del siglo XVI. En él se sitúan las dos Vírgenes que se veneran en la iglesia, la de Salas, del siglo XIII; y la de la Huerta, imagen gótica del XIV, forrada de plata.
Fotografía: Fernando.
Retablo de plata donado por Pedro IV a la Virgen de Salas hoy en el Museo Diocesano de Huesca. Quizás la escultura de la Virgen de la Huerta estuviera ubicada en él, pues al estar recubierta de plata pudiera pertenecer al mismo. Es curiosa la historia de este pequeño retablo de plata: el rey, muy devoto de la Virgen de Salas, durante la guerra que mantuvo con Pedro IV el Cruel, se vio en la necesidad de vender todas las joyas que la Virgen de Salas poseía para poder pagar los gastos de esa guerra. Una vez finalizada el rey, agradecido a la Virgen, encargó en Barcelona el 24 de agosto de 1366 al orfebre Bartolomé Tutxó, un retablo de plata con siete escenas de la vida de la Virgen para colocarlo en la ermita. Hoy lo podemos ver en el museo diocesano de Huesca.
Detalle del Retablo anterior. Escena de la Epifanía. Curioso es el tratamiento en las vestiduras del Rey Baltasar, representado como un caballero medieval.
Ya para terminar decir que en el año 1989 se descubrieron unas pinturas góticas lineales en el muro sur de la cabecera. En las que se representan imágenes de Santa Lucía de Siracusa y de Santa Catalina de Alejandría. (Siento no poder poner fotografías, ya que fue imposible entrar en la ermita, y las que encuentro en la web, tienen derechos de autor, y no puedo ponerlas en mi trabajo. Pero si os interesa verlas en la magnífica página de Antonio García Omedes, las podéis ver).
Bibliografía:
-Página sobre arte románico, de Don ANTONIO GARCÍA OMEDES:
http://www.romanicoaragones.com/3-Somontano/990393-HU-Salas.htm.
-Estudio sobre el santuario, llevado a cabo por D. FEDERICO BALAGUER: Santa María de Salas. Sus problemas históricos:
file:///C:/Users/Usuario/Downloads/Dialnet-SantaMariaDeSalas-2111014.pdf.
-Datos históricos y del retablo de plata donado por Pedro IV: Lamberto de Zaragoza y Ramón de Huesca: “Teatro histórico de las iglesias del reyno de Aragon”, vol. 7, Imprenta Miguel Cosculluela, 1797:
https://books.google.es/books?id=XEMAAAAAMAAJ&pg=PA140&lpg=PA140&dq=sobre+la+iglesia+de+la+virgen+de+salas+huesca&source=bl&ots=JrYWfdA-zO&sig=UhEMEZGIhFWkpPHhuvUDqT3rhkc&hl=es&sa=X&ved=0CD4Q6AEwBWoVChMIwdmK1bS_xwIVy9YaCh2WIQGc#v=onepage&q=sobre%20la%20iglesia%20de%20la%20virgen%20de%20salas%20huesca&f=false
-- FRANCISCO DIEGO DE AYNSA, Fundación. Excelencias, grandezas, y Cosas Memorables de la Antiquísima Ciudad de Huesca… , Huesca, 1709, pág. 598
-RICARDO DEL ARCO: “El obispo Don Juan de Aragón y Navarra. Hijo del Príncipe de Viana”: file:///C:/Users/Usuario/Downloads/Dialnet-ElObispoDonJuanDeAragonYNavarraHijoDelPrincipeDeVi-2253386%20(1).pdf
-Cantigas de Alfonso X el Sabio en donde se nombra a la Virgen de Salas: la 43, 44, 109, 114, 129, 161, 163, 164, 166, 167, 168, 171,172,173,189 y 247.
Cantiga 168 de Alfonso X el Sabio donde se narra el milagro realizado por la Virgen de Salas. Cuando una mujer de Lérida que se le había muerto su hijo, pidió a la Virgen de Sala su intercesión y resucitó. Os pongo el enlace de la cantiga cantada, por si os apetece conocer cómo eran las cantigas y cómo las cantaban los juglares: